| Morag MacKenzie | |
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| Información | |
| Nombre completo | Morag Gunn MacKenzie |
| Nacimiento | 1747, Escocia |
| Edad | 24 años (La cruz ardiente) |
| Clan | MacKenzie |
| Familia | William B. MacKenzie (esposo) Jeremiah B. MacKenzie (hijo) |
| Actor serie TV | Elysia Welch |
Morag MacKenzie es la mujer que Roger ayuda en el Gloriana.
Apariencia física[]
Es una mujer bonita que llama la atención pues anda tan erguida como el tallo de un lirio. Su rostro muestra incertidumbre. Es huesuda y sus dientes son blancos y pequeños. Es pequeña y sus manos son del tamaño de las de un niño. Pelo castaño y menuda.
Carácter[]
Se muestra recelosa pero, al mismo tiempo, siente curiosidad por lo que le rodea. Es testaruda.
Biografía[]
Morag es la mayor de nueve hermanos. Está casada con William Buccleigh MacKenzie y tiene un hijo llamado Jeremiah.
En junio de 1769 Morag, junto a su marido y su hijo, embarca en el puerto de Inverness en el Gloriana, que los llevará hasta Wilmington, Carolina del Norte.
Eventos en los libros[]
Una noche durante la travesía en el Gloriana, Morag se acerca a uno de los marineros y comienza una charla trivial con él sobre el tiempo hasta que una señora mayor que la acompaña le insiste en que le pida al muchacho, que se presenta como MacKenzie, un poco más de agua, pues está amamantando a un bebé. Morag se ruboriza y finalmente acepta el balde de agua.
Pocos días después surge una epidemia de viruela en el barco y, una noche, la tripulación comienza a tirar por la borda a todos los pasajeros con algún síntoma de la enfermedad. Inmediatamente Morag se esconde junto a su bebé en la bodega pues el crío presenta un sarpullido y fiebre de la leche y, al ser las pústulas similares a las de viruela, corre el riesgo de que lo tiren por la borda pensando que está contagiado. La noche siguiente, estando escondida en un pequeño espacio entre el maderamen y la enorme cadena del ancla, ve entrar en la bodega a MacKenzie que, al ver movimiento en la oscuridad se va hacia ella y la sujeta por las muñecas. Morag le suplica que no diga nada porque matarían al bebé.
Morag también estaba enferma, no era viruela, sólo que la humedad había llegado a sus pulmones y tosía, estornudaba y respiraba con dificultad. Después de un rato hablando con MacKenzie, lo convence de que el bebé no tiene viruela y el joven decide ayudarla y le llevará agua y comida hasta que al niño le desaparezca el sarpullido en unos días.
Después de un mes de viaje Morag estaba delgada y sucia y, tras dos días enteros escondida sin dormir vigilando que las ratas no mordiesen a su bebé, estaba agotada. Al día siguiente Morag vuelve a recibir la visita de MacKenzie; esta vez se la queda mirando, la coge de los hombros y la besa en la boca. Ella sólo lo mira sin decir nada.
Un día de primavera de 1771, Morag se encuentra lavando ropa en un arroyo en compañía de otras mujeres. De repente, un hombre se aproxima a ella. Se queda tranquila al ver que va desarmado y su cara le resulta conocida. Cuando el extraño la llama por su nombre, ella reconoce a Roger MacKenzie, el joven marinero que salvó a su hijo a bordo del Gloriana.
Como Roger coge algo de ropa de su colada, y se la lleva a un lugar apartado, ella no tiene más remedio que seguirlo exigiéndole que se las devuelva. Él le aclara que solo era una excusa para poder hablar más tranquilos en un lugar apartado. Ante las preguntas sobre el estado de su familia, Morag va cogiendo confianza y la conversación se va tornando más íntima. Menciona a su marido William para prevenir sutilmente a Roger de su cercanía y se presta a recoger su ropa para poder marcharse. Pero él está demasiado cerca y cuando Morag se agacha para recogerla, ambos se acaban dando un cabezazo. Roger le sigue insistiendo sobre los peligros que rodean a su familia advirtiéndola de la inminente batalla y animándola a partir cuanto antes. Eso hace que ella piense en el bebé que espera.
Roger se resiste a abandonarla y finalmente, le da un suave beso. En ese momento, son sorprendidos por William, el marido de Morag. Ella trata de disculpar a Roger recordándole a su esposo el favor que les hizo protegiendo a Jeremiah cuando viajaban con Stephen Bonnet. A pesar de estas explicaciones, William le grita y amenaza para que se vaya pero, de repente, estalla un proyectil que los aturde a todos y tiene que atender a su marido en el suelo.
Cuando su marido regresa después de apresar de nuevo a Roger, le hace jurar a su esposo que no lo matará. A regañadientes, William acepta y eso la tranquiliza. Cuando se llevan a Roger, Morag queda al cuidado de un regulador llamado Johnny. Sin embargo, acaba siendo testigo de la ejecución de la sentencia impuesta a Roger.
Ante esta situación, Morag sale corriendo en busca de los Fraser, que están organizando una partida de búsqueda. Llega agotada y cojeando y les cuenta con angustia que el gobernador Tryon está ahorcando a Roger.
Días más tarde, Morag y su familia abandonan la colonia.Serie de TV Outlander de Starz[]
La actriz Elysia Welch interpreta a Morag MacKenzie en la cuarta temporada de la serie de TV Outlander.
Citas[]
"—¡Quédate ahí! Tengo el puñal de mi marido —le advirtió—. ¡No dejaré que me lo quites, te mataré, juro que lo haré!", Morag a Roger en Tambores de otoño
"—Júralo sobre la cabeza de tu hijo, Will: que no harás daño a este hombre ni ordenarás que lo maten—.”, Morag a William Buccleigh MacKenzie en La cruz ardiente