La botica del Maestro Raymond es la herboristería en la que Claire compra hierbas y remedios mientras vive en París .
En la saga…[]
Esta botica, que se encuentra en la Rue de Varennes de París, había pertenecido anteriormente a Du Carrefours pero desde 1720 era regentada por el Maestro Raymond.
En 1744, cuando Claire la conoce, su interior tenía un limpio mostrador de madera que se extendía a lo largo de toda la tienda. Los estantes iban desde el suelo hasta el techo con un altura que duplicaba la de un hombre.
Algunos estantes tenían puestas de vidrio para proteger las sustancias más raras y caras. Sobre los armarios había cupidos gordos y dorados con aspecto de borrachos. Una repisa recorría la pared a la altura de los ojos y estaba repleta de frascos de porcelana adornados con volutas doradas, flores y bestias. Cada frasco tenía un etiqueta escrita con letra negra.
Las vigas estaban ennegrecidas por el humo que emanaba de la chimenea de pizarra. Sobre el fuego una mesa de piedra con agujeros sostenía alambiques de vidrio, recipientes de cobre y un destilador pequeño. Del techo colgaba un gran cocodrilo de escamas amarillas, duras y brillantes que al parecer estaba embalsamado.
Debajo de la mesa de piedra había una oscura abertura que servía de entrada a una habitación secreta bastante pequeña. Dos paredes estaban ocupadas por estantes en forma de panal que exhibían cráneos de diferentes bestias de todas clases y tamaños.
Habia ademas un armario alto al fondo pintado con gran cantidad de símbolos extraños, cruces y espirales metidas en pentágonos y círculos, que según Claire podían ser símbolos de la Cábala. El armario tenía un doble fondo al que se podía acceder tras tocar una secuencia correcta de pestillos y lengüetas.
La botica era frecuentada por gente de la nobleza que en muchas ocasiones no solo buscaban remedios para enfermedades, sino también venenos para sus enemigos y soluciones para embarazos no deseados.
Claire visita la botica en tres ocasiones. La primera en búsqueda de hierbas para intentar remediar el insomnio de Jamie. Luego vuelve con Jamie unos días después de ser “envenenada” con la cáscara sagrada y regresa por última vez tras el ataque que sufren Mary Hawkins, Murtagh y ella.
En el rodaje de la serie de TV...[]
Dado que la botica del maestro Raymond es un lugar ficticio se construyó un set para recrear este lugar nacido del ingenio de Diana Gabaldon. Tanto el interior como el exterior de la botica corresponden a sets construidos específicamente para la serie.
Jon Gary Steele, jefe de producción de diseño de la serie Outlander, confiesa que, además de ambientar una tienda parisina del siglo XVIII, querían que fuera un lugar mágico y místico. En su investigación de las boticas de esa época encontraron que, debido al movimiento de la Ilustración, la gente se sentía fascinada por todo lo que fuera extranjero y exótico. Para esto pusieron por las paredes símbolos de alquimia y magia y colgaron un cocodrilo del techo tal y como se describe en el libro. [1]